All Mod Cons • Cuadragésimo Aniversario

Hace un año les hablé de The Jam y su debut In The City y ahora repito para comentar sobre su tercera entrega (la segunda me la salté), uno de mis álbumes de rock inglés favoritos por su sobresaliente composición. Al haber iniciado paralelamente al punk, no era de extrañarse que sus primeros pasos fueran en la dirección agresiva y rápida del estilo del momento en la Gran Bretaña, pero desde el principio se notaba que The Jam estaba para música y letras más sofisticadas, lo cual consolidan de maravilla en All Mod Cons, una obra de respeto.

Sin perder el ataque, el fino sarcasmo y sin exceder los tres minutos de duración, en esta oportunidad van más allá del estándar agregando valor a través de la melodía y de la armonía. El disco tiene muchos momentos acústicos, sin distorsión, pausando con frecuencia y sabiduría todas las cuerdas, volviendo muy de vez en cuando a los acordes de poder y a los punteos para mantenerse firmes en la lógica rock, como cabalgando sobre una bestia muy poderosa a la que controlan con mucha destreza (las estrofas) y que por breves momentos dejan en libertad (los coros).

English Rose y Fly son unos temas particularmente delicados, que demuestran mucho de lo que eran capaces. La interpretación del bajo de Bruce Foxton es una absoluta belleza, por cierto.

Con verlos por unos segundos basta para entender su propuesta. Fueron muy influenciados por sus compatriotas antecesores The Who y también The Kinks (a quienes versionan en el divertido tema David Watts), y con estas composiciones hicieron perfectas rivales a las de sus contemporáneos The Clash o Buzzcocks, así como marcan un camino importante de rockers enfocados en la musicalidad que llega a sentirse en las décadas que siguieron, pasando por The Stone Roses y llegando hasta Green Day.

Por su parte, la pertinencia de su comentario social y la forma de expresarlo los deja muy bien parados, ahora revisando las letras me llamó mucho la atención In The Crowd, en donde exploran la psicología de las masas y por supuesto se burlan de la inevitable realidad:

"and everyone seems just like me,
they struggle hard to set themselves free
and they're waiting for the change (los vueltos)"

En fin, aquí Paul Weller y su combo dejan un documento muy poderoso de cómo inventarse canciones y de cómo suena la música cuando hay un gran compositor en el equipo, así como de la crudeza y la elegancia del rock inglés.

Feliz aniversario!