El primer disco que tuve Jane's Addiction fue la hermosa compilación Kettle Whistle de 1997, que era el único material que se conseguía por estas tierras en ese entonces. Es una compilación de rarezas que en su librillo tiene una nota introductoria de Henry Rollins que siempre recuerdo:
[...] Nothing's Shocking and Ritual de lo Habitual are brilliant but in my opinion never captured the soul-expanding gift that the band delivered live [...] A song like "Three Days" on record is a great piece of work, but when you were standing in front of the PA and those big chords ponded you after the drum jam, it was incredibly moving [...]
Se que lo dijo en parte porque el disco compilaba muchos temas en vivo y en parte porque tiene toda la razón, además ¿quién mejor que Rollins para explayarse al respecto? Pero bueno, creo que el comentario si me arruinó de por vida pues tengo la discografía de Jane's Addiction y si me deja una paranoia de que, precisamente, podría ser aun mejor. En todo caso son favoritos personales y quiero anotar lo siguiente en los 30 de Ritual de lo Habitual:
En los éxitos, que es lo que une a la gente con el disco, hay un concepto latente que caracteriza a esta banda. En la segunda mitad de Stop! hay un puente increíble donde cantan: One come a day, the water will run - No man will stand for things that he had done - Hurrah! Luego, el coro de Ain't No Right va: Ain't no wrong now, ain't no right - Only pleasure and pain!; por último está la famosa Been Caught Stealing, en donde celebran la cleptomanía. No se si sea por el final de la guerra fría y la paranoia nuclear, o el inicio de una era menos oscura y más conectada, pero claramente están cuestionando la culpa y al régimen del bien y del mal. No es como yo lo habría cantado pero me fascina.
Ahora, un gran álbum no puede sostenerse solo con éxitos y lo hermoso de éste se encuentra en el Lado B. Las épicas Three Days y Then She Did... contienen el lado emocional que sostiene el lado racional de los párrafos anteriores. Allí es donde está el valor agregado en composición y narrativa, donde quedaron registrados unos de los momentos instrumentales y líricos más especiales de Jane's. De hecho, acabo de encontrar un video del baterista Stephen Perkins, a quien admiro por su punch y sonrisas permanentes, hablando al respecto en alguna drum clinic a la que lo invitaron:
Como pudieron escuchar, Three Days y Then She Did... son los platos fuertes aquí, que por cierto ocupan 20 minutos de los 51 que integran el disco. Aunque Nothing's Shocking tiene más éxitos comerciales, como dice Perkins, solo tiene una gran composición que es Ted, Just Admit It, en ese sentido, Ritual de lo Habitual es "mejor". El bajo en esas dos canciones es majestuoso, sosteniendo las otras tres intervenciones con gran solidez y groove. La batería, le dedica mucho más a los toms que a los platillos, dándole el toque "tribal" que se les conoce y que recuerda Rollins en aquellos párrafos anecdóticos que cité al principio. Dicho sea de paso, la inolvidable portada de Ritual es una pequeña puesta en escena de lo que se cuenta en Three Days, y Then She Did... tiene unos sintetizadores ra-rí-si-mos que funcionan muy bien. (Más notas sobre como impulsaron el metal alternativo, aquí).
La guitarra, tocada por un joven Dave Navarro sin tatuajes, es fantástica. Vale la pena hacer una pasada completa enfocándose en ese instrumento para ver la sutileza y la destreza del hombre en las seis cuerdas. Mi veredicto es que ya está en plena forma pero todavía medio paso atrás de su mejor momento, que para mí es el One Hot Minute junto a los Red Hot Chili Peppers, lo que me plantea una duda interesante y es: ¿Cómo habría resultado este disco producido por Rick Rubin? De pronto no habría salido tan bien como lo que logró aquí Dave Jerden, quién sabe...
En los 13 años que siguieron no hubo otro trabajo de estudio pues se dedicaron a otros proyectos como Porno For Pyros, los Peppers y el festival Lollapalooza que iniciaría poco después y que se mantiene vigente hasta el día de hoy. Así, por mucho tiempo, Ritual de lo Habitual fue la última pieza discográfica de una de las leyendas del género reinante en el Siglo XX. Este álbum, aun expuesto por tres décadas al mainstream, ya sea través de sus hits o como documento del origen del metal alternativo, conserva bastante magia en todos esos minutos desconocidos para la audiencia que como les conté, fundamentan el estatus de culto que se ganaron por esa época.
Feliz aniversario!