Para 1980 la relación entre el rock y la política se había explorado con amplitud en ambos lados del Atlántico. Desde la contracultura sesentera se hicieron aportes como el Kick Out the Jams de los MC5 (1969), y tiempo después, con las "joyas de la corona" Nevermind the Bollocks y The Clash (1977), se entierra el hippismo y se da inicio a una rebeldía más agresiva que sería la regla en la década de los ochenta, donde la represión también se afinó a manos de conservadores vieja guardia como Margaret Thatcher y Ronald Reagan, quienes se dieron gusto manteniendo ideales de antaño a punta de bolillo. Por esto, el hardcore, estilo violento por definición, es una de las escenas más especiales de esa década y Dead Kennedys uno de sus principales exponentes.
Lo digo pues con Fresh Fruit For Rotten Vegetables llegan a superar tanto el voltaje sonoro como el compromiso político demostrado por otros punks hasta ese momento, dejando los estándares de lo que se esperaba de una banda bien arriba, llegando al activismo bajo la marcada sombra del underground, en una época donde debías llenar un concierto u hacer oposición al Gobernación de California, sin Internet.
De nuevo, catorce temas comprimidos en 33 minutos es el empaque clásico del hardcore. Ahora, si bien violento, es su musicalidad lo que le permite alcanzar el estatus de culto a este disco, no lo duden. Solo en temas como Drug Me o California Uber Alles, se siente la velocidad que desataba el pogo y que se volvió el molde que poco después continuarían agrupaciones como Bad Religion o Descendents. Claro, seguro el álbum no le hace justicia a la energía de los shows en vivo, pero en todo caso es un gran disco de punk, agresivo pero melódico. Por cierto, recuerdan la versión que hizo Sepultura de Drug Me? Ese homenaje dice mucho desde lo sónico y desde lo político.
Pero lo más importante de Dead Kennedys es el carisma, a cargo en gran parte del vocalista Jello Biafra, quien a largo plazo no pudo quedarse con la marca, pero si con el respeto. De todo lo que rodea este aniversario quiero señalar que este álbum es el que apropia el sarcasmo como lenguaje, un atributo que adoro pues para ser sarcástico necesitas mezclar tu conocimiento de lo que pasa en el mundo con sentido del humor. No es 100% sarcástico pues la portada y temas como Looking Forward to Death van directo al punto sin adornos, pero solo el nombre de la banda y una apertura titulada Kill The Poor anuncian que la dosis de sarcasmo es grande. Hasta el cierre con la versión de Viva Las Vegas (original de Elvis Prestley) es sarcástica, pero cuánto se acerca al ciento por ciento es una tarea que les dejo a ustedes.
En todo caso, musical, comprometido políticamente y sarcástico, Fresh Fruit For Rotting Vegetables es una de las razones por las que llevo años obsesionado con el hardcore. También, como les había dicho hace unos días, es otra de las razones por las que 1980 es el primer gran año para ese estilo en términos discográficos. Siempre ver es bueno recordar que el mundo no cambia ni cambiará, pero con una buena banda sonora.
Feliz aniversario!