Sabemos que esta obra es una golosina electrónica aclamada por las masas melómanas y por la crítica (entre ellas, la comunidad de esunatrampa), lo que le valió estatus de culto desde hace tiempo, pero ahora que cumple treinta años aguanta preguntarse ¿por qué?
Aquí vamos. Desde el primer y hasta el último segundo de Selected Ambient Works 85-92 uno es trasladado a otro presente. La tendencia predominante son leves pulsos techno sobre profundas y calmadas atmósferas que inducen una especie de meditación en la que uno está muy presente pero en otro espacio. Es muy sutil y por esto también es fácil de ignorar, pero entre más atención prestas, los sonidos y las capas dan para perderse por muchos minutos y sorprenderse con su poder, aparentemente inofensivo.
Temas como Green Calx o Hedphelym apuntan hacia el estilo frenético u oscuro que el proyecto adoptaría en los años siguientes, pero sin duda es un álbum elevado y meditativo, en cuyos momentos más ambient hay muchas cosas interesantes aconteciendo (nadie espera menos de Aphex Twin). Primero, los beats y patrones rítmicos que en su mayoría te costarían bastante imitarlos en batería, y segundo, las melodías, que tiene varias y por lo cual es una experiencia muy musical. Por éstas razones y a diferencia de otras obras de la electrónica como la recientemente reseñada Come With Us de The Chemical Brothers, Selected Ambient Works 85-92 es una fuente de samples más que un collage de samples. Por supuesto esto no hace menos creadores a los hermanos químicos, simplemente que a mi tocayo, don Richard D. James, siempre se le ha facilitado crear éstos viajes empezando desde cero.
Por nombrar algunos ejemplos, Heliosphan es una excelente exponente de ritmo y Ageispolis de melodía (oído a Ugly Boy de Die Antwoord para notar cómo trabajaron sobre esa melodía). Ptolemy podría ser una canción perfecta de techno y mis preferidas son Tha, que realmente me domina, y We Are the Music Makers, que samplea de manera hermosa a Willie Wonka & the Chocolate Factory (1971). Por supuesto, sus 74 minutos son impecables en su totalidad (y el cierre con Actium también es una belleza).
Para cerrar, efectivamente hay mucho más aquí que lo que sugiere el título. Me recuerda a The Shape Of Punk To Come, pues son títulos intencionalmente provocativos, buscando revaluar el alcance de los géneros referidos, más no para etiquetarse con ellos, pues resultarían insuficientes. Aphex Twin siempre ha sido experimental, mezclando estilos y tendencias, saliéndose del lugar común de la electrónica, y Selected Ambient Works 85-92 es la primera gran prueba de ello. Y claro, más allá de cualquier análisis al respecto, es un álbum delicioso de escuchar y que continúa envejeciendo muy bien. Feliz aniversario!